EL ACCESO A LA TIERRA Y MEJORES RENTAS PARA LOS PRODUCTORES CLAVES PARA EL RELEVO GENERACIONAL EN AGRICULTURA
El Parlamento Europeo ha debatido esta mañana un completo informe sobre el relevo generacional de las futuras explotaciones de la UE que identifica este problema, el de las rentas bajas e inestables, la ausencia de servicios en el medio rural, el acceso al transporte y las nuevas tecnologías de la comunicación y las dificultades para obtener financiación como problemas a resolver para garantizar el relevo generacional en las explotaciones agrarias de la UE. El informe expone que “en 2020, la mayoría (57,6 %) de los jefes de explotaciones agrícolas (de cualquier sexo) tenía 55 años o más, que solo el 12 % aproximadamente de los titulares de las explotaciones tenía menos de 40 años y que, de estos últimos, casi la mitad tenían entre 35 y 39 años”.
En su primer párrafo este documento recuerda que, en muchos Estados miembros, una proporción relativamente elevada de agricultores tiene 65 años o más, existiendo en promedio tres jefes de explotación mayores de 65 años por cada agricultor menor de 40 años (según cifras de 2016). La situación se complica en los estados en los que el porcentaje de agricultores jóvenes es inferior a la media europea y el de propietarios de explotación en edad de jubilación superior a la media.
Vistos los datos en el debate de hoy he apostado por considerar el suelo rústico como un bien estratégico y añadir al mercado del mismo, transparencia, datos y una regulación homogénea para mejorar las posibilidades de acceso a la tierra de los nuevos agricultores. Superar este problema y mejorar la posición de los productores en la cadena de valor para mejorar sus rentas son dos de los factores a resolver para impulsar el relevo generacional en el sector agrícola, contribuir a la seguridad alimentaria y frenar la despoblación.
la viabilidad social, económica y ambiental de la actividad agropecuaria y la seguridad alimentaria de la Unión dependen del relevo generacional en el sector primario. Los factores que más lo entorpecen son el acceso a las tierras, una retribución justa de la actividad, una mejora en el acceso a servicios básicos y una evolución de la imagen del sector que lo asocie, también a la tecnología, el conocimiento y la innovación.
Por estas razones considero decisivo reivindicar el carácter estratégico del suelo rústico y avanzar hacia medidas homogéneas en toda la Unión para añadir transparencia, mejorar los datos y regular mejor este mercado. También componer una sinergia entre las políticas de la PAC que tratan de promover esta aparición de nuevos agricultores con la estrategia europea contra la despoblación. También hay que reforzar los programas de desarrollo rural y el apoyo a los jóvenes que emprenden en el sector en sus operaciones financieras”.
Como no podía ser de otra manera en línea con el documento que presenté en las naciones unidas en nombre del Parlamento Europeo, una propuesta de Estatuto de la mujer en el medio rural inspirado en la propuesta vasca al respecto he insistido en que la Política Agraria Común debe seguir apostando por apoyar el relevo, mejorar posiciones en la cadena de valor e introducir la dimensión de género para reconocer el papel la potencialidad de las mujeres. Algo trascendental también para los traspasos de explotaciones. La llegada de nativos digitales es otra oportunidad para mejorar el impacto en el sector de las revoluciones tecnológica y digital.
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