MAS NOTICIAS POSITIVAS SOBRE EUROPA
Esta mañana he comenzado el día con una mesa redonda organizada por Radio Euskadi en el Parlamento Europeo para hablar de los temas que hemos trabajado en esta sesión. Ha tenido su gracia porque las tres personas que participábamos, Eider Gardiazabal, Iñaki Irazabalbeitia y yo misma hemos hablado de lo mismo: la escasísima atención que se presta en los medios a las cuestiones europeas y el tratamiento tan unívoco y negativo que se tiene de las instituciones europeas cuando producen una buena cantidad de buenas noticias con directa incidencia en la vida de las personas. Además me ha tocado recordar, como habéis visto en el vídeo, que muchos de los problemas que están generando las decisiones de Bruselas tiene su origen en decisiones equivocadas y mantenidas en el tiempo de gobiernos, como los españoles, que han equivocado por completo el modelo de desarrollo del país.
Siempre que vienen periodistas de allí y pasan por aquí se dan cuenta de que aquí hay noticias de interés, que tenemos una dedicación grande y que se pueden conseguir muchas cosas que nos afectan muy directamente. Vuelven convencidos de que hay que tratar estos temas de otra manera pero también es verdad que el impulso no dura demasiado. A ver esta vez.
Y es que como os contaba ayer el pleno de esta semana se las trae. Hemos aprobado por ejemplo una directiva que incide en un asunto tan de moda y tan espinoso como el de las hipotecas, un mercado que en 2009 suponía el 52% del PIB europeo y cuyo funcionamiento en países como España está originando algunos episodios bastante vergonzosos de falta humanidad con desahucios que resultan éticamente intragables y las más de las veces económicamente difícilmente justificables. Si recordáis bien la primera intervención judicial que consiguió parar un «lanzamiento» como algunos llaman a sacar a alguien de su casa vino de Europa por una aplicación del tribunal de Luxemburgo de una normativa sobre consumo.
Vista la dimensión del mercado y los problemas que ha generado su funcionamiento como desencadenante de la crisis y como origen de tragedias humanas incalificables las instituciones europeas han legislado rápido y a mi juicio bien para añade un cuadro de garantías mínimas para los clientes de las hipotecas que parte de la base de considerar la vivienda un derecho básico y que debería acabar con abusos como los desahucios que se viven por ejemplo en España.
Se acabó la letra pequeña y la posición de ventaja con que los bancos cubrían sus espaldas a base de cláusulas incomprensibles que firmabas porque nadie te las explicaba, nadie las leía y parecían formar parte de un ritual obligatorio. De hecho yo puedo aportar una experiencia personal. Cuando firmé el crédito para comprar un piso que tengo en Bilbao se me ocurrió leer el contrato. Allí pille lo que eufemísticamente llaman ahora claúsula suelo mediante la cual las entidades financieras se garantizaban un mínimo de interés independientemente de cual sea el precio del dinero. Cuando la vi y pregunté pretendieron convencerme de que eso era «lo normal» y que el dinero «nunca iba a bajar tanto». Yo exigí que me quitasen esa condición y hasta que no conseguí que me la quitasen no firme. Nunca me he arrepentido porque el precio del dinero bajo mucho más. Así han engañado a mucha gente que no entiende como con el Euribor como está ellos pagan un interés mucha mayor. Suelen ir al banco y entonces les enseñan el papel que firmaron en el que aparece la desaprensiva «claúsula suelo». Lo mismo me pasó con otra que me penalizaba si llegaba a amortizar el crédito antes de tiempo que también viene de serie en esos contratos y conseguí que me quitasen bajo amenaza de cambiar de entidad bancaria.
Por eso ayer me pareció una noticia excelente que desde Europa se haya elaborado una normativa que acabará con estas prácticas y que se centra en dotar de más transparencia a los contratos con riesgo especial y los procesos de evaluación de solvencia y regula que no se penalice a los clientes por el reembolso anticipado de los créditos. la directiva fomenta decisiones más informadas protegiendo un proceso de reflexión y asesoramiento eficaz. esto va a permitir a cualquier cliente de una entidad bancaria comparar, informarse bien y elegir, de verdad la mejor oferta y va a obligar a muchas entidades financieras a dejar de prevalerse de su posición de ventaja y de su la lógica incapacidad que la mayoría de la gente tiene para entender el lenguaje administrativista y mercantil que suele haber en esos papeles.
En definitiva ayer, con la aprobación de esta directiva aprovechemos una oportunidad para demostrar que Europa sirve para mucho. Ahora hace falta ver cómo van a trasponer los estados miembros estas disposiciones a la legislación interna. Espero que en España, el reino de la hipoteca confusa, de la legislación abusiva para con los clientes de este producto financiero y de la crisis del ladrillo esto se haga a toda velocidad. Ya he pasado la seña a nuestros compañeros del Congreso y este asunto lo vamos a perseguir bien de cerca.
Por eso hoy era un día muy adecuado para al menos decir en voz alta que no entiendo cómo no se siguen estos temas mucho más de cerca y de modo más cotidiano. Y esta no es precisamente una mala noticia, creo yo.
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