DOS BUENAS NOTICIAS PARA EL SECTOR PESQUERO

| 11 febrero 2019 | Responder

El Parlamento Europeo ha debatido esta tarde tres informes sobre el sector pesquero que afectan al sector vasco. El primero ha sido el  reglamento que regula y organiza el Plan plurianual para las poblaciones de peces en las aguas occidentales y aguas adyacentes, que se refiere a la práctica totalidad de las aguas pesqueras comunitarias correspondientes a las costas que se asoman al Atlántico entre ellas están, lógicamente las aguas del litoral vasco, pero también buena parte de las aguas territoriales de otros estados miembros en las que faenan nuestros arratzales.

Los otros dos eran sendos informes para aprobar este acuerdo pesquero que da cobertura a 36 buques europeos abanderados en España, Francia y Portugal, entre los que figuran varios atuneros vascos que se repartirán con el resto de la flota una cuota de cinco mil toneladas al año en las aguas territoriales de Costa de marfil. Cuando yo llegue hace diez años al Parlamento Europeo las sanciones impuestas por el Consejo al régimen de Laurent Gbagbo mantenían cerrado el puerto de Abidjan a los barcos europeos. Y este es uno de los puertos más importantes de la fachada oeste de África tanto para descargas de pesca como para cuestiones relacionadas con los cambios de tripulación y abastecimiento y logística de los barcos.

En el primer caso se trataba de incorporar a estos planes plurianuales el principio de regionalización que se introdujo en la última reforma de la Política Pesquera Común para adaptar sus preceptos a idiosincrasia de cada pesquería. El éxito de los planes plurianuales para las pesquerías de la Unión se basa en la seriedad de los datos científicos que avalan las decisiones que se toman y en la coherencia con que se apliquen sobre áreas de pesca y especies. Estas condiciones son fundamentales para que las flotas puedan beneficiarse de la estabilidad que ofrecen unas cuotas previsibles a medio plazo. Cuotas que no estén pendientes de negociaciones realizadas con nocturnidad y opacidad y que de un día para otro cambien radicalmente las expectativas de profesionales e industria pesquera.  La regulación que se votará y aprobará mañana sin duda es un avance sobre la situación anterior, pero sigue presentando debilidades.

Para mi uno de los grandes triunfos de este reglamento es que ha eliminado cualquier posibilidad de que el Consejo Europeo, la institución en la que se reúnen los gobiernos de los estados miembros, pueda suspender, aunque sea de manera breve y por razones excepcionales, las vedas de capturas decretadas para recuperar una especie. “Abrir esa posibilidad hace realidad el dicho “pan para hoy, hambre para mañana”. Y en materia de los stocks de pesca “hambre para mañana” significa “hambre para siempre”.

Pero del mismo modo que reconozco esta importante mejora, he insistido en tres cuestiones que completarían esta evolución en positivo, que incluí en mis enmiendas y que seguiré defendiendo con mi voto son, definir mejor el concepto de mejores datos científicos disponible, dar más garantías a los pescadores profesionales frente a la pesca recreativa y propiciar que la Comisión Europea actúe cuando, sobre la base de la regionalización, los estados miembros pongan en riesgo las medidas de control por no hacer uso de las competencias que tienen.

En el primer tema apuesto porque se consideren válidos los estudios realizados con métodos de trabajo transparentes y una certificación de neutralidad por parte de autoridades técnicas solventes, para evitar tentaciones de que una coyuntura particularmente crítica edulcore determinados resultados en aras a mantener determinados niveles de actividad.

Otro tema pendiente es el de la pesca recreativa. está pendiente la realización de estudios más exactos y generalizados en todos los estados miembros sobre el impacto que esta actividad tiene sobre los stocks. Además, creo que hay que controlar mejor y evitar cualquier competencia en el mercado entre capturas profesionales y recreativas. Finalmente apuesto por empoderar a la Comisión y facilitar la intervención europea cuando los estados no actúen porque adaptar principios básicos a las situaciones específicas no debe confundirse con dejar de aplicarlas.

COSTA DE MARFIL

Por otra parte y como decía al principio no queda sino celebrar la continuidad de la flota atunera vasca en las aguas de Costa de Marfil parte de los 36 buques europeos que aprovecharán estas oportunidades de pesca. El parlamento se ha ocupado esta tarde igualmente de debatir  sendos informes que otorgan la luz verde de la Cámara a esta operación de cooperación y política pesquera. Vista la vocación de estos acuerdos como herramientas de mejora de la gobernanza de los mares en todo el mundo he querido destacar las buenas prácticas sociales y ambientales de estos barcos vascos, certificados como “amigos del mar” desde 2010. Además, he subrayado el desarrollo que inducirá este acuerdo en el sector pesquero local del mencionado país africano y su papel para extender los estándares europeos para impulsar la pesca sostenible en aguas de todo el mundo.

Los acuerdos pesqueros entre Europa y terceros países han demostrado que son una herramienta fundamental para extender en todo el mundo los estándares ambientales y sociales que se aplican al sector en aguas comunitarias. Además, inducen desarrollo en los países con los que se firman y ofrecen oportunidades de pesca a nuestros profesionales. En este caso van a ser 36 los barcos atuneros de España, Francia y Portugal los que pescarán al abrigo de este acuerdo que estará en vigor hasta el 2024.

Las aportaciones económicas que gracias al acuerdo recibirá Costa de Marfil, más de un millón de euros al año, compensan por un lado las capturas. Pero la mayor parte de los recursos se destinan al desarrollo del sector pesquero local. En ese capítulo además del apoyo al emprendimiento femenino en el sector y la apuesta por las operaciones en el puerto de Abidjan se completa con una apuesta por la calidad de los estudios científicos sobre los stocks de pesca; por el establecimiento de áreas de pesca protegidas por razones biológicas y por el refuerzo de las medidas de control contra la pesca no declarada, no regulada y no reglamentada.

pero si algo me parece especialmente destacable es el empeño en mejorar la posición y condiciones de trabajo de las mujeres en el sector local de la pesca artesanal, básicamente dedicadas al ahumado de pescado, y el fomento de las organizaciones profesionales femeninas. Además, ha mencionado el apoyo a las operaciones del puerto de Abidjan, afectado en su día por las sanciones del Consejo contra el régimen de Laurent Gbagbo. Esta instalación es una de las más importantes de la costa oeste de África y fundamental para las operaciones tanto de la flota local como de los barcos europeos que operan en la zona.

 

 

 

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