UNA VISITA CON UN COLOFON DE LUJO
Las buenas noticias de esta semana han eclipsado todas las demás. Pero no para siempre. Creo que debo esta crónica a sus protagonistas, las personas que durante la pasada semana nos recibieron en el Basque Culinary Center, en la universidad de mondragón, en Eutokia o en Innobasque o con las que mantuvimos una reunión en el centro de Inteligencia para la automoción en Amorebieta. Porque la semana pasada, que estábamos en Euskadi a la espera de lo que finalmente ocurrió el día 20, nos preparamos allí un programa de trabajo centrado en conocer algunas de las iniciativas de innovación más destacadas de las que tenemos en el país y con las que, de una u otra manera hemos tenido relación en nuestro trabajo como europarlamentatria en Bruselas.
Así el miércoles dedicamos el día a conocer el Basque Culinary Center, la nueva facultad de ciencias de la gastronomía y culinarias que se ha puesto en marcha en Donostia. La estructura del edifico que lo alberga, en el parque tecnológico de Donostia, me sugiere, con la perspectiva que me ha dado la visita, todo un símbolo sobre este centro. Es mucho más de lo que uno se imagina. Vista la modestia con que lo presentan sus promotores uno se imagina una lonja habilitada en precario para empezar. Se sorprende cuando llega porque efectivamente se encuentra con un edificio de perfil bajo, pero con un llamativo revestimiento de chapas doradas que oculta un edificio de cuatro pisos que rellena una ladera y ofrece unas instalaciones impresionantes. Limpias, modernas, inmejorablemente equipadas, con las más modernas herramientas que la tecnología pone hoy al servicio de la manipulación de alimentos. Y con unas expectativas de expansión y crecimiento que se fundamentan en el reconocimiento nacional, estatal e internacional que va granjeándose el BCC.
Nos atendió José Luis Galiana, el director de comunicación del centro que ya estuvo con nosotros en Bruselas durante la presentación de tres iniciativas turísticas que hicimos en el Parlamento Europeo. Ya conocemos el Guggenheim y la Catedral de Vitoria. Nos faltaba el recién abierto Basque Culinary Center.
Desde allí viajamos hasta la sede central de la Universidad de Mondragón en donde compartimos una intensa sesión de trabajo con su rector Josu Zabala el vice-rector Jon Altuna y el decano de empresariales Lander Beloki. He visto las cifras de empleabilidad de este centro de enseñanza superior y ahora las entiendo mejor que nunca. Creo que Mondragón dispone de un sistema de contacto y relación entre la investigación que realiza y las necesidades de la sociedad y en particular las de las empresas que me pareció muy interesante. Un modelo a seguir. Y una auténtica fábrica de emprendedores que estoy segura de que, a medio plazo, va a determinar muy positivamente los valores de nuestra sociedad en materia de autoempleo y creación de nuevas cooperativas, empresas y en definitiva riqueza. Y todo en el marco de un mundo globalizado en el que van a trabajar estos profesionales, al menos trilingües. Una pena que las prisas nos impidiesen grabar un vídeo a Josu porque merece la pena escucharle siempre.
Desde Mondragón regresamos a Bilbao para asistir a la presentación en sociedad de la candidatura de Josu Erkoreka . Mucha gente en el Ensanche acompañó a mi paisano en la singladura en que se embarca de nuevo tras esta legislatura de sobresaliente desempeño. Si fuese una costera o una campaña de pesca podríamos decir que la tripulación que ha capitaneado nos ha llenado las lonjas de pescado y, por lo tanto de esperanza. Zorionak Josu! y a recabar de nuevo la confianza de la ciudadanía. Si nos miden por los resultados lo tenemos muy, pero que muy bien.
Al día siguiente seguimos con nuestro recorrido de Innovación visitando la agencia Innobasque en la que nos recibió su presidente Guillermo Ulacia, el director general José maría Villate Leire Bilbao, directora de innovación empresarial, Alberto Bokos, responsable de comunicación y Luis María Ullibarri, director de innovación social con quién habíamos coincidido en Bruselas en una jornada dedicada al asunto. Fue otro encuentro cordial y muy instructivo. Me alegré de que esta iniciativa siga contando con apoyo institucional porque hoy tiene más sentido aún que el día en que comenzó a funcionar. Se han creado dinámicas de innovación, se ha colocado ese concepto en la agenda de empresas y personas y creo que se ha hecho una gran tareapara poner en valor nuestro principal recurso: el conocimiento de las personas. Apasionante acertar en cómo gestionarlo. Y muchas cosas por hacer. Aquí os dejo el resumen que el propio presidente de Innobasque hacía del rato que trabajamos juntos.
Desde allí nos desplazamos a Amorebieta, porque estamos preparando un asunto sobre movilidad eléctrica que no puedo detallar hasta que esté más maduro, pero que nos permitió volver a un lugar que dejó verdaderamente sorprendidos a los miembros del grupo ALDE . Ya tendré ocasión de comentaros, más pronto que tarde, espero, el resultado de estos trabajos.
Ese jueves, el histórico 20 de octubre en que ETA iba a declarar el final de sus actividades terroristas, estuvimos también en Eutokia el centro de innovación social del ayuntamiento de Bilbao en el que conocimos una decena de interesantes empresas y/o profesionales desarrollando ideas con proyección ya en el mercado. Os recomiendo que entréis en la página del centro, porque cada proyecto se explica allí con todo detalle. Yo, desde aquí solo puedo agradecer todas las explicaciones que recibí, expresar mi admiración por el trabajo que desarrollan y la creatividad que les ha llevado hasta donde están y alegrarme de que hayan dispuesto de un centro como Eutokia para catalizar las posibilidades que tienen estas iniciativas.
El día lo finalizamos en Zumarraga, en el batzoki, donde estuve compartiendo con afiliados y simpatizantes de EAJ el trabajo que realizamos aquí en Europa. Cuando llegábamos nos confirmaron que acaba de publicarse el famoso vídeo de la BBC. Pero es ya es otra historia…que va a ser también muy importante para el desarrollo económico y social de Euskadi. Un colofón de lujo para esta visita.
La verdad es que tras estas visitas una vez más me sentí orgullosa de ser, en el Parlamento Europeo, el escaparate de un país como el nuestro. Siempre hemos defendido que tenemos una marca que significa mucho y bueno: «Made in Euskadi». Me alegro, a la vista de algunas crónicas periodísticas que he leído este fin de semana, que otros hayan llegado décadas después a las mismas conclusiones y de que nadie les mire mal, como nos hicieron a nosotras y nosotros cuando planteamos algo tan simple y tan importante para nuestro tejido empresarial. Entonces era una veleidad independentista. Hoy, al parecer, una idea brillante.
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