FORMACION, DIGITALIZACION E INFRAESTRUCTURAS CLAVES PARA DES CARBONIZAR EL TRANSPORTE DE MERCANCIAS

Esta tarde hemos tenido un debate parlamentario para valorar en Estrasburgo en el pleno del Parlamento europeo, la comunicación de la comisión sobre transporte de mercancías ecológico que se va a destinar a acelerar la des carbonización del transporte de mercancías. La propuesta contiene cuatro normas. Las tres primeras han sido ya adoptadas por el ejecutivo comunitario y están listas para su tramitación parlamentaria. Se trata de la directiva de pesos y medidas máximas para vehículos de transporte, un reglamento sobre capacidad de infraestructura ferroviaria en el espacio ferroviario europeo único y un proyecto de Reglamento para un marco armonizado de contabilización de las emisiones de gases de efecto invernadero de los servicios de transporte de mercancías y pasajeros. A ellas se unirá la propuesta de revisión de la directiva sobre transporte combinado que previsiblemente será aprobada en el colegio de comisarios antes de que acabe este mes.

 La iniciativa me parece necesaria y bastante completa, especialmente si se combina adecuadamente con otros paquetes legislativos en vigor que podríamos estar aplicando con más firmeza. Yo he lanzado una teoría con ánimo de provocar y especialmente de insistir en medidas que pueden añadir capacidad a las infraestructuras que ahora tenemos. Porque creo que una formación profesional predictiva, capaz de preparar a los nuevos profesionales que requerirá la integración de los distintos modos de transporte, completar las infraestructuras y acelerar la digitalización del sector son tan importantes para des carbonizar el transporte como revisar los objetivos de emisiones. Igualmente he apostado por un proceso de transición transparente e impulsado por una ciudadanía cómplice que recibirá como recompensa mejores servicios y un aire más limpio.

Dada la participación del transporte en el conjunto de emisiones de gases efecto invernadero, cifrada hoy en más de un 27% y especialmente la del transporte de mercancías, reducir esta aportación es una de las claves para alcanzar nuestros objetivos climáticos. Este conjunto de normas incide en cuestiones críticas para conseguirlo, incluidas emisiones y vehículos. Pero a la vista de las experiencias vividas con las normas sobre transporte de carreteras y ferroviario espero que además los debates que suscite este conjunto de normas sirva para cumplir directivas y reglamentos que en vigor, como los paquetes de movilidad y ferroviario que son una base excelente para afrontar esta transformación.

Por eso he señalado cuatro condiciones que deben acompañar a la tramitación de este conjunto de directivas y reglamentos. Para conseguir los objetivos de reducción de emisiones es necesario avanzar en la construcción de un sistema integrado e inteligente de movilidad a nivel europeo y eso requiere una clave: las personas. Necesitamos una formación profesional predictiva para preparar los profesionales que necesita un sistema integrado de movilidad. Igualmente un instrumento imprescindible, la digitalización. No podremos mejorar en la gestión e integración de los modos de transporte sin un ecosistema de datos de movilidad.

Ambas cuestiones deben completarse con unas condiciones: cumplir nuestros compromisos de inversión en infraestructuras y equiparlas. Las mismas vías, con ERTMS, multiplican la capacidad y velocidad que pueden acoger nuestros corredores prioritarios de transporte. Finalmente, toda la transición debe realizarse en un contexto: abordar esta transición con transparencia y buscar la complicidad ciudadana recordando cada día que este proceso necesita del compromiso de cada uno de nosotros. La recompensa: aire más limpio y mejores servicios.

 

 

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