EL TRABAJO COLABORATIVO SOBRE LAS VACUNAS, MODELO PARA IMPULSAR LA LUCHA CONTRA EL CÁNCER
El pleno del Parlamento Europeo ha debatido hoy y votará mañana un informe de iniciativa propuesto por la comisión especial de lucha contra el cáncer que ha trabajado para revisar y articular una estrategia europea contra el cáncer. Aunque la Unión representa el 10% de la población mundial una cuarta parte de los casos de cáncer detectados en el mundo se diagnostican en los 27 estados que la componen. Anualmente más de 1,3 millones de europeos fallecen a causa de algún tipo de cáncer. Más de 6.000 son niños.
El informe identifica y propone medidas para igualar las expectativas y posibilidades de la ciudadanía en materia de detección precoz y acceso a los tratamientos más avanzados. Igualmente plantea un panel de medidas para reforzar la prevención y las conductas saludables y abre igualmente un capítulo para apoyar a enfermos, cuidadores y las más de 12 millones de personas que han superado la enfermedad y aspiran a recuperar una vida normal.
Este documento realiza una aportación extraordinaria. Apuesta por el modelo de trabajo colaborativo que se ha puesto en marcha contra el covid durante la pandemia para aplicar a los avances en la lucha contra el cáncer. El trabajo conjunto para obtener una vacuna demuestra que una mejor coordinación entre sistemas sanitarios, más medios e inversiones igualmente coordinadas en materia de investigación e innovación en terapias y prevención y objetivos y prioridades compartidos dan resultado.
El nuevo Plan Europeo de Lucha contra el Cáncer debe inspirarse en este modelo para avanzar en las terapias y eliminar las evidentes diferencias en el acceso a tratamientos y medios de diagnóstico que se observan entre los estados miembros. Eliminar estas desigualdades, además de una cuestión de cohesión y justicia social es una medida clave para reducir la mortalidad, hacer avanzar la investigación y además potenciar la prevención.
Espero que la polémica sobre algunas cuestiones incorporadas al informe, como las propuestas para restringir la publicidad de bebidas alcohólicas en algunos espacios desvíen la atención de la verdadera noticia. Lo fundamental es que estamos avanzando para que un modelo de éxito, de coordinación y trabajo en común se aplique con todas sus ventajas a la lucha contra una enfermedad que mata cada año a más de un millón de europeos. La prevención es una de las piezas de esta estrategia. Nosotros apoyamos la información detallada a las personas consumidoras y el consumo responsable de alimentos y bebidas como herramienta de prevención, porque fomentarla requiere información. Pero reconocemos el esfuerzo que muchos sectores, y en el caso vasco particularmente el vino, están realizando para recordar que como mejor se disfruta de un alimento tan importante para nuestra cultura gastronómica y el desarrollo de empresas sostenibles, apegadas al territorio y centradas en la calidad, es el consumo moderado del producto que fabrican.
Por eso voy a votar a favor de esta revisión de la estrategia europea contra el cáncer que ha elaborado una comisión especial del parlamento europeo. Espero que el modelo de trabajo colaborativo puesto en marcha para la vacunación contra la COVID sirva para reducir las diferencias en el acceso a tratamientos y métodos diagnósticos que se observa entre los distintos estados de la Unión. Este avance en la equidad, sumado a la mejora de la prevención aplicando el código europeo contra el cáncer, la promoción de dietas más saludables, la identificación e información sobre conductas de riesgo y el apoyo a enfermos y cuidadores son las bases de la aportación que puede hacer una estrategia europea en la lucha contra esta enfermedad.
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