MAS MEDIDAS PARA QUE LA RED PRIORITARIA PARA EL TRANSPORTE EUROPEO SE TERMINE EN 2030
La Comisión de Transporte y Turismo del Parlamento Europeo ha analizado hoy las enmiendas presentadas al informe de revisión de las redes Trans-Europeas de Transporte, el plan director de inversiones que se centra en generar un conjunto de infraestructuras que conecten de norte a sur y este a oeste todos los estados que integran la Unión Europea. El proyecto describe una red principal, que debe terminarse en 2030, en la que se incluyen como proyectos prioritarios todos los que eliminan cuellos de botella entre estados miembros, propician la inter modalidad en los distintos corredores y, en consecuencia, alivian la congestión y contribuyen a reducir emisiones. Uno de ellos es la Y vasca.
Nuestra principal preocupación es que estas obras, que empiezan a parecerse a las de El escorial por los retrasos que acumulan, se acaben en 2030. Para ello hemos planteado hoy que no se puedan añadir nuevos proyectos a las Redes Trans europeas de Transporte hasta que no se acabe la red principal. También que se incremente la presión ante los estados miembros para que cumplan sus compromisos de inversión. Igualmente insistimos en que los trabajos tienen una prioridad y las conexiones transfronterizas que eliminan cuellos de botella entre estados, como la Y vasca, deben seguir siendo ultra prioritarios. No es un capricho. En la legislatura del pacto verde estos proyectos tienen un papel central en las políticas contra el cambio climático y para impulsar una movilidad integrada y sostenible. Finalmente abogamos porque ciudades y regiones se sumen activamente al impulso de este proyecto comunitario con fórmulas imaginativas como la encomienda de gestión que funciona en Euskadi.
Nosotros hemos presentado estas propuestas a través de las 17 enmiendas que hemos aportado a este informe centradas en garantizar que la red básica se termine en 2030. En ellas se detallan nuevos instrumentos para que los estados cumplan sus compromisos cómo reforzar el papel de los coordinadores de corredor y que sus informes sean vinculantes. También que no se pueda ni cambiar mapas, ni desviar fondos del mecanismo Conectar Europa para proyectos no prioritarios.
Observada la experiencia vasca para promover la construcción de un tramo que acumulaba más de una década de retraso también defendemos que se aprovechen al máximo las posibilidades del principio de asociación para propiciar que autoridades locales y regionales se impliquen en el impulso de estas obras prioritarias. Hay fórmulas administrativas novedosas, como la encomienda de gestión puesta en marcha en el País Vasco que han permitido superar retrasos en inversión de una década en un tramo crítico transfronterizo.
Las enmiendas insisten en que este tipo de conexiones transfronterizas que eliminan cuellos de botella entre estados, son de la más alta prioridad. También que los proyectos prioritarios de esta red trans-europea de transportes son pieza clave de las políticas contra el cambio climático y permiten explicar un concepto que construye Unión, el de valor añadido europeo.
Esta es una idea central para nosotros a la vista de los argumentos que suelen utilizarse para para oponerse a los proyectos que incluye la Re Trans Europea. En Euskadi, por ejemplo se insiste en el argumento de los tráficos locales y se obvia que la Y vasca está integrada en un corredor, el atlkántico, llamado a permitir al ferrocarril aportar mucho más a la movilidad a nivel europeo que lo que aporta hoy. Y el impacto de las posibilidades que se abren hay que medirlo a nivel europeo. Por ello proponemos que se utilicen estos argumentos para explicar los proyectos. nada mejor a esos efectos que recordar las reiteradas advertencias del Tribunal de Cuentas Europeo para que no se acumulen más retrasos en la construcción de estas infraestructuras.
Finalmente, recordamos que en esta apuesta europea para propiciar que la movilidad en la Unión sea más integrada, inteligente y sostenible, el ferrocarril juega un papel clave, como se constata en las inversiones planificadas. Sin embargo, construir las infraestructuras no será suficiente si no se aplica con rigor el cuarto paquete ferroviario para evitar que la dispersión de las normas y el proteccionismo que se aplica en algunos países a este modo de transporte mantengan la fragmentación del mercado.
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