MAS PARTICIPACION DEL SECTOR PARA MEJORAR EL REGLAMENTO DE CONTROL DE LA PESCA
La comisión de pesca que preside mi colega en el grupo Renew Europe, Pierre Karleskind ha desarrollado esta mañana una sesión telemática cuyo principal punto en el orden del día era debatir el informe en el que el Parlamento Europeo plasmará sus aportaciones a la propuesta de la Comisión Europea para reformar el Reglamento de control de la pesca. La última reforma de la política pesquera común y los problemas de aplicación del actualmente vigente obligan a adaptar sus contenidos a la nueva situación.
Mis aportaciones desde Bermeo se han centrado en propiciar que el sector pesquero participe intensamente en la reforma de esta norma si queremos que genere confianza y redactar una norma más fácil de cumplir, próxima a la realidad del sector. La vigente produce unas cargas burocráticas difíciles de asumir para un sector muy marcado por la naturaleza de su actividad y el medio en el que se desarrolla. Por eso hemos expuesto hoy nuestras recetas para adaptar esta norma a las exigencias de la nueva Política Pesquera Común y apostar por un sector económica y ambientalmente sostenible.
El grupo Renew Europe en el que estamos encuadrados en esta legislatura me ha encargado representarle en las negociaciones de este informe. La propuesta de partida la está redactando mi colega socialista Clara Aguilera con la que he trabajado muy a gusto y en plena colaboración en otros informes. En esta reunión telemática he comprometido mi colaboración para aprobar un texto realista y pragmático que alivie las cargas administrativas que soportan ahora las flotas pesqueras para garantizar que sus capturas se ajustan a la legalidad.
Para conseguirlo he insistido en la necesidad de abrir los trabajos de reforma del reglamento al sector mediante un proceso participativo que genere confianza. Ahora la incertidumbre atenaza a un sector que no tiene muy buena experiencia con el reglamento vigente, redactado desde un punto de vista demasiado teórico y alejado de la realidad que se vive en los barcos de pesca, especialmente en los de bajura. Por eso un método de trabajo más abierto a los profesionales contribuirá a simplificar el actual, definir claramente los conceptos básicos y propiciar así que sean interpretados y aplicados de modo uniforme en toda la Unión. La inexistencia de estas condiciones es uno de los principales problemas que plantea la aplicación del actual.
En la reunión he adelantado además algunas de las aportaciones que contendrán mis enmiendas. Como ya os he contado esta semana, nos alegramos de que, por fin, el reglamento incluya la regulación de la pesca recreativa para armonizar mejor su práctica, con la profesional. Además, plantearemos una batería de propuestas para que los mismos principios sobre trazabilidad que se aplican a otros productos alimenticios lleguen a la pesca. Esta es una reivindicación histórica porque su aplicación es clave para garantizar los derechos de los consumidores y mejorar la posición de los pescadores en la cadena de valor del sector. No es comprensible que este mecanismo se aplique a la casi totalidad de los productos alimenticios y no a la pesca. Y aquí hay contenidos muy complejos claves para el etiquetado, etc.
Está claro además que hay que aprovechar esta oportunidad para adaptar a la realidad del sector, un sector duro al que le resulta complicada la burocracia convencional, las exigencias que plantea el reglamento para documentar capturas y descargas en el diario de pesca, porque no siempre es posible prever cuando se van a producir estas. Por eso abogaremos por acercar las exigencias y los márgenes de tolerancia a las posibilidades reales de cumplimiento a la vista de las condiciones en que se desarrolla la actividad pesquera. También se propondrá una revisión de las medidas de control mediante circuito cerrado de TV para, garantizando el control, evitar fomentar una imagen negativa del sector.
Todas estas mejoras pueden conseguirse acelerando la digitalización de muchos trámites. La pesca no puede quedarse al margen de una tendencia que avanza muy rápidamente en otros sectores. Igualmente propondremos reformas en las disposiciones sobre paises terceros. Trataremos en definitiva que el nuevo reglamento sea más realista y cumplible que el vigente y que mejore la sostenibilidad ambienta y la rentabilidad económica de la actividad.
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