GRECIA, YOU CAN. RESCATE Y REFORMAS.
Hoy he tenido la oportunidad de intervenir ante el presidente griego, en el debate que hemos celebrado sobre la situación de aquel país. Me parece que hacía falta en esta situación que la discusión sobre el nuevo rescate griego abandonase la falta de transparencia y las versiones cruzadas y se jugase delante de todas y todos, en el parlamento. Para eso sirve. Y se ha conseguido. Se lo debemos al presidente de ALDE Guy Verhofstad que fue quién lanzó la propuesta y la defendió con tenacidad y coraje. Ha servido además para reivindicar el papel del Parlamento Europeo en estas negociaciones. La transparencia, la posición de consenso que siempre aporta la euro-cámara es los grandes debates europeos hubiese sido balsámica en una situación como la griega.
El debate ha servido además para poner a cada uno en su sitio. Creo que hoy ha quedado claro, delante de todo el mundo que las autoridades griegas se equivocaron al levantarse de la mesa. Ha quedado claro igualmente que el presidente Juncker decía la verdad y que puso a disposición de los negociadores una propuesta más que posibilista que fue tachada de mentira por las autoridades griegas cuando se dio a conocer. Hoy ha sido significativo que Tsipras no haya matizado ni una coma a la versión que sobre aquella parte del episodio negociador ha repetido el presidente Juncker ante el pleno. El silencio se ha extendido a la ruidosa y extrañísima entente c0ordial que desde los escaños de la extrema izquierda y la extrema derecha europea saludaba con aplausos cada intervención de Tsipras y con abucheos y gritos las de todos los que nos atrevíamos a salirnos de lo que estas gentas consideran “políticamente correcto”. Y es que detrás de la retórica de la dignidad aparece también la completa ausencia de respuestas para atender a los grandes retos que tiene Grecia para superar su situación.
Hoy he tenido que resumir en un minuto nuestro punto de vista. Parto de la base de que solo una quita de parte de la deuda griega permitirá al país salir adelante. Pero también de que esta media solo podrá tomarse con un calendario concreto de reformas que tienen que ajustar el tamaño del sector público griego a las posibilidades del país. Hoy me ha encantado escuchar a representantes de los países europeos con menos renta recordar a Tsipras que sus parados, que muchos de sus asalariados, cobran mucho menos que la mayoría de los jubilados griegos después de los recortes. Esas personas están contribuyendo con sus impuestos a seguir pagando un sistema a todas luces insostenible. Un sistema en el que los privilegios de los armadores, grandes fortunas libres de impuestos, de la iglesia ortodoxa y de tantos y tantos estamentos hacen inviable la actual estructura pública de Grecia.
Por eso hoy he apostado en ese minuto por renegociar un rescate con un apartado social destinado a paliar las urgencias humanitarias creadas por la crisis para mantener Grecia en la zona Euro. Pero además he exigido una profunda reforma para acabar con el sistema griego que ya era insostenible fuera de Europa porque el gobierno heleno está atascado en echar la culpa a los demás y explotar el agravio en vez de comprender que buena parte de la solución está en sus manos.
EAJ-PNV ya ha dicho que está de acuerdo con agotar todas las posibilidades para evitar la ruptura de la zona Euro y la salida de Grecia de la misma pero consideramos que para conseguirlo, además de mejorar la actitud de la Unión, debe haber un profundo cambio de actitud del gobierno griego.
Para explicar nuestra posición he comenzado refiriéndome a la situación de paro y crisis que vivía Euskadi a comienzos de la década de los ochenta (La comunidad vasca no alcanzaba el 70% de la renta media de la UE) y he recordado que nuestro país salió de una dictadura militar en horribles condiciones. Éramos una ruina industrial, nos acechaba la violencia. Pudimos echar la culpa a los demás y vivir explotando el agravio o entender que buena parte de la solución estaba en nuestras manos. Así que nos pusimos manos a la obra y comprobamos que efectivamente teníamos voluntad y capacidad para salir adelante. Hoy rozamos el 130% de renta sobre la media Europea y la Unión acaba de ponernos como ejemplo de políticas e protección social. Antes había alabado también nuestra política industrial e incluso nos pone como ejemplo de cómo y por qué un territorio concreto, con otro modelo de desarrollo puede presentar mucho mejores registros de paro, por ejemplo que su estado miembro. En varios informes parlamentarios considera que el Concierto es una de las claves de esa experiencia de éxito. En cuestiones clave para avanzar haya un modelo de crecimiento sostenible, inteligente e integrador, como la innovación, también salimos bien parados.
Por eso hoy he tenido la oportunidad, enorme oportunidad de que la voz de EAJ-PNV se oiga en toda Europa hablando de Grecia y del modelo Euskadi. Y hemos conseguido que el mensaje llegue directamente a oídos del propio presidente Tsipras. Le he dicho, para empezar que los actuales mandatarios de Grecia y por supuesto los anteriores, están atascados en la primera opción, echar la culpa a los demás y vivir explotando el agravio. Por eso le he animado a que cambié de actitud, a que confíe más en los griegos, porque estoy segura de que saben y pueden.
A la hora de negociar un nuevo rescate es evidente que hoy la prioridad son las personas y hay soluciones y voluntad para paliar las urgencias humanitarias que ha creado esta situación. Pero igualmente es imprescindible abordar profundas reformas para solventar la situación. El presidente de nuestro grupo ha concretado además cinco pasos imprescindibles para hacer sostenible la transformación que necesita Grecia. El sistema Griego era insostenible sin Europa y tiene la oportunidad de reinventarse con y dentro de nuestra Europa. Nuestra comunidad debe mucho a la cultura clásica griega, la que nos enseñó que nada se puede construir los unos contra los otros. El camino emprendido para tratar de evadir las propias responsabilidades y señalar las de los demás, la opción Tsipras, es la peor de las posibles.
Los cinco pasos que consideramos imprescindibles para hacer creíble la voluntad del gobierno heleno de afrontar la situación comienzan por concretar actuaciones para acabar con el sistema clientelar y concretar medidas para luchar contra la corrupción que lastra las finanzas públicas griegas. Lo ha dicho alto y claro en su discurso, para mí el mejor de esta mañana, el líder de nuestro grupo Guy Verhofstadt. Como ha dicho el ex primer ministro belga queremos fechas, textos concretos y compromisos para reducir el tamaño de la administración pública y para transformar el sistema financiero griego en un bloque eficiente y saneado que sustituya al actual sistema público. Igualmente hay que abrir los mercados especialmente el de trabajo y desmontar los privilegios de que disfrutan los armadores, la iglesia ortodoxa, los militares, las islas griegas y los partidos políticos. Sin esa disciplina fiscal y en la gestión de los recursos públicos ningún rescate será posible.
Category: Blog