SECTOR NAVAL:BETI GORA BETI AURRERA

Escribo esta crónica de urgencia desde Vilnius en donde me toca defender el trabajo que hemos hecho en una resolución sobre mejora de la democracia y transparencia en el seno de Eurolat. Esta semana se celebra aquí en la capital de Lituania la asamblea de Eurolat y ya os contaré el resultado, porque hemos conseguido aportar ideas y propuestas en esta iniciatuva que proceden de la experiencia que adquirí en este asunto cuando era presidenta del parlamento vasco. Es verdad que estoy aquí trabajando en un  tema importante y que me interesa, pero no podía evitar tener la cabeza en Bruselas. Gracias a las nuevas tecnologías he seguir en directo la rueda de prensa del vicepresidente Almunia sobre el Tax Lease (os la pego en esta crónica) y me ha quedado una sensación agridulce. Hemos mejorado algo sobre los peores pronósticos pero hay que devolver dinero. Así que lo que cabe ahora es pedir diligencia, inteligencia y transparencia a quien debe liderar el proceso que es el gobierno español y poner en marcha, de una vez una política europea para el sector que evite enfrentamientos internos y nos proteja del dumping asiático.  Conozco nuestro sector, sus profesionales y estoy segura de que vamos a superar esto, porque saben hacer barcos de primera calidad. Ojalá se despejen las incertidumbres y podamos poner en valor esta realidad.Por eso desde aquí todo mi ánimo y beti gora beti aurrera!!!

Personalmente creo que la decisión de la Comisión Europea sobre el régimen de ayudas español a la construcción naval es injusta y contradictoria con la defensa de la industria europea.  La Comisión ha suavizado la decisión inicial que planteaba la devolución de todas las ayudas percibidas por los inversores desde el comienzo del sistema de ayudas, pero creo que lo justo y pertinente siguiendo sus propios argumentos  hubiese sido, en su caso, aplicar la sanción desde 2009, porque una carta de la Comisaria de competencia fechada ese año en la que se informaba al ministerio de industria de un estado miembro no se habían encontrado problemas legales en estas ayudas produce seguridad jurídica y confianza legítima. No entiendo porque se utiliza como inicio del proceso de sanción la resolución del expediente francés y no la carta de Neelie Kroes, o mejor aún, la fecha de inicio del expediente que es 2011. Por eso creo que no merecíamos la sanción y que en su caso la fecha pertinente era 2011.  Definitivamente es  malo lo que ha pasado pero es peor permitir que el sector naval europeo se desangre en peleas entre estados miembros en vez de poner en marcha una política europea para el sector que afronte la competencia desleal asiática. Así que a la Comisión Europea, además de reprocharle que la sanción debería haber sido menor cabe animarle a que resuelva las denuncias pendientes con rapidez, corte esta dinámica de denuncias cruzadas y organice una estrategia europea de construcción naval, porque si no vamos dados.

Ahora además hay que volverse hacia el gobierno español, porque si habéis oído al Comisario, este ha dejado bien claro que es el ejecutivo de Rajoy el que va a tener que cuantificar, hacer efectivas las devoluciones y manejar el dinero que se recaude por esta vía. Espero, para empezar que se aprenda de errores anteriores, porque parece increíble que nunca se comunicase el sistema de ayudas. Pido también al gobierno español inteligencia a la hora de  cuantificar las devoluciones de la manera más favorable para los intereses del sector naval. Vista la imaginación que se aplicó para construir el sistema de tax lease cabe pedir al menos la misma dedicación para encontrar procedimientos inteligentes y razonables para que los afectados puedan efectuar las devoluciones y que por este procedimiento impida la fuga de inversores de un sector que necesita financiación para hacer valer sus virtudes.

Finalmente creo que el dinero recuperado debe manejarse con total transparencia y además debe revertir en el sector promoviendo la innovación para profundizar en la competitividad de los astilleros. Nuestros astilleros son competitivos, hacen barcos de calidad y tecnológicamente avanzados. Hay un sistema de ayudas respaldado por la UE, el nuevo tax lease, otra realidad sobre la que ha hecho mucho hincapié el comisario. Es hora de despejar incertidumbres y hacer valer las capacidades de los profesionales de un sector que en Euskadi ya vivió una durísima reestructuración y esta en condiciones de competir si tomamos medidas serias contra el dumping de todo tipo que viene de los astilleros del sudeste asiático. En eso hay que centrar ahora nuestros esfuerzos.

Bueno, me vuelvo a la asamblea de Eurolat. Espero poder contaros esta tarde o mañana que hemos conseguido sacar adelante otro informe en el que la marca Basque Country va a tener su espacio.

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