ECONOMIA Y PERSONAS

Hemos pasado una semana como siempre intensa en Estrasburgo y en esta ocasión, bajo la nieve. Por aquí os dejo, para empezar una foto del momento en que llegaba ayer a trabajar. Una nevada guapa que me acompañó todo el camino, tras el pleno, en el viaje de regreso hasta Bruselas. Hoy ya de vuelta en Bilbao a seguir contactando con sectores y preparando iniciativas. Y en capilla ya del viaje que me toca hacer la semana que viene a Chile con Eurolat.

Y me meto en otra vorágine casi sin solución de continuidad después de un pleno como el de esta semana que ha sido especialmente intenso en lo económico. Algunas de las cosas que hemos trabajado tienen especial incidencia en Euskadi, así que os las cuento.

EL PROBLEMA DE LAS EMPRESAS Y LA ENERGIA

Para empezar por lo más inmediato y un asunto que tiene una incidencia real en el futuro de empresas vascas ayer me toco denunciar de nuevo el problema que sufren las industrias que consumen mucha energía eléctrica a cuenta de la normativa sobre emisores indirectos de CO2 que ha puesto en marcha la Unión Europea. Ayer aproveché la presencia de varios comisarios para pedir además soluciones, porque estas normas están alterando la competencia en algunos sectores en beneficio de los países del norte de Europa.  Esta norma perjudica a industrias vascas que han efectuado enormes esfuerzos inversores y de modernización. Esto es lo que dije.

Para ello aproveché el turno de explicación de voto en un informe sobre inclusión del sector de la energía en las políticas de cohesión, para denunciar una vez más el problema que se ha generado con las ayudas de estado que se han autorizado para compensar a las empresas que consumen grandes cantidades de electricidad los costes que asumen en su condición de emisores indirectos de CO2.

En Euskadi hay sectores particularmente afectados por esta problemática, como el electroquímico, consumidor intensivo de energía eléctrica. Por eso hemos desplegado una intensa actividad frente a las instituciones europeas para tratar de modificar esta normativa y propiciar que las inquietudes de las empresas vascas lleguen hasta la comisión europea. Entre ellas destacan, como habréis visto en la crónica que os adjunto, la organización de reuniones entre representantes del sector afectado con europarlamentarios de la comisión de industria, responsables de la comisión y la elaboración de una decena de preguntas parlamentarias relacionadas con esta problemática. Aquí os dejo las preguntas que hemos hecho a la comisión para alertar sobre la gravedad del problema.

Sobre las directrices que regulan las ayudas.

Sobre la distorsión en la competencia que origina el sistema de cobro a emisores indirectos.

Sobre la gestión de la tasa por emisiones indirectas de CO2

Sobre competencia y tasa de emisiones.

Sobre tasa de emisiones y recortes presupuestarios

Sobre emisiones y acuerdo de Kioto.

Sobre fiabilidad del cálculo de los índices de compensación.

CONTRA EL PARO JUVENIL

Entre las cosas realmente importantes que hemos aprobado esta semana figura una resolución que aboga por ofrecer una garantía de empleo o formación a los jóvenes que se encuentren en paro como muy tarde cuatro meses después de quedarse sin trabajo. Esta iniciativa es un toque de atención para animar a la comisión a que legisle en esta materia y en esta dirección. Ví al comisario Andor muy animado y comprometido con estas ideas y es posible que se conviertan en una propuesta formal de la Comisión en pocos meses. Veremos que dicen los estados miembros porque las diferencias entre las legislaciones laborales y las realidades económicas de unos y otros auguran un camino difícil para la tramitación de una directiva que contenga estas propuestas. Pero por ahí hay que empezar.

VIGILANDO A LAS AGENCIAS DE RATING

Además en este pleno hemos aprobado otros dos informes que me parecen especialmente importantes. Uno se refiere a las agencias de calificación crediticia, las famosas agencias de rating, esas que con sus informes deciden la calificación que merece la deuda de un país y casi siempre la suerte de su prima de riesgo y la credibilidad de su deuda soberana.  Para saber más os dejo aquí un interesante artículo al respecto que publica la web del parlamento europeo.

Como habéis visto, después de dar muchas vueltas Europa se ha atrevido a meter mano a estas entidades. Y eso se va a notar en los próximos meses. La falta de transparencia es una de las condiciones que ha propiciado la crisis que vivimos. Ese problema se proyecta no solo sobre el funcionamiento del sistema financiero, que ha deparado algunos sonados escándalos, sino también sobre algunos organismos de control, como las agencias de calificación. Creo que es una buena idea extender a estas organizaciones condiciones de trabajo que son moneda corriente en las empresas que auditan cualquier tipo de cuentas. Entre ellas están prevenir y limitar los conflictos de intereses, evitar la difusión de notas de calificación en momentos críticos que pueden favorecer la especulación y completar los resultados de la calificación con información sobre el método y datos empleados para elaborarla.  Pero lo que me parece definitivo es que las agencias asuman, frente a terceros las consecuencias de sus errores de manera efectiva incluyendo indemnizaciones por los daños injustamente causados. Creo que esa previsión va a ser lo que en castellano llamamos “mano de santo”.

A POR LOS EUROBONOS

No menos importante es el primer paso sólido y firme que se da en el camino hacia la puesta en marcha de un mecanismo europeo de sindicación de la deuda, los famosos eurobonos, un informe que ha coordinado mi compañera de grupo Sylvie Goulard, una persona muy competente. De hecho, ayer comencé mi intervención sobre este asunto agradeciendo el trabajo que ha realizado para conseguir aprobar este informe, porque es de esas cosas que hacen historia.

Las dificultades por las que atraviesa hoy la construcción europea nos parecerán increíbles mañana, cuando comprobemos lo que nos mejora este paso firme y verdadero hacia la unión económica real que necesitamos. La unión se legitima ante los ciudadanos cuando demuestra su capacidad para mejorar su calidad de vida. Eso hoy empieza por ofrecer  soluciones frente a la crisis.

Los eurobonos ofrecen una buena medida de lo que nos falta: una verdadera unión monetaria, unidad fiscal y disciplina y lealtad entre todos los estados y regiones con haciendas propias para eliminar suspicacias y hacer posibles este mecanismo de solidaridad, responsabilidad y en definitiva verdadera unión, la solución más eficaz contra los ataques de los mercados.  Estas son las cosas que necesitan y reclaman los europeos y no tengo dudas de que serán legitimadas con el apoyo ciudadano.

Mañana os contaré las cosas que hemos hecho para que sea más fácil y menos incómodo viajar en compañías Low cost.

Tags: Agencias de Rating, co2, electroquimica, emisores indirectos, Eurobonos, Sylivie Goulard

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